“Playas libres, basura cero” es una iniciativa de la Fundación Coca-Cola y Fundación Natura que busca involucrar a la comunidad en el cuidado de playas, mitigando el problema de la contaminación y disminuyendo prácticas de degradación del ecosistema marino-costero».
Fundación Coca-Cola y Fundación Natura celebran los resultados de la primera fase del proyecto “Playas libres, basura cero”, en cuatro zonas de Colombia: Coveñas (Sucre), Bahía Solano (Chocó), Puerto Colombia (Atlántico) y San Andrés Isla (Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina), con las cuales se ha pretendido fomentar una cultura de cuidado de playas que mitigue y disminuya la contaminación del ecosistema marino-costero.
Según un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, “el plástico representa el 85% de los residuos que llegan a los océanos, y para 2040, se esperan que los volúmenes de este material en el mar se tripliquen, con una cantidad anual de entre 23 y 37 millones de toneladas». Por eso, ambas fundaciones han realizado, desde el 2021, 26 jornadas de limpieza de playas en las que fueron recolectadas 10.5 toneladas de residuos sólidos, con la colaboración de 1.094 personas.
Adicionalmente, y entendiendo que no existe una única solución para salvaguardar los mares y océanos, se desarrollaron procesos formativos virtuales de 8 sesiones con 11 conferencistas a 297 participantes de diferentes departamentos, todos con el objetivo de adquirir conocimientos sobre la gestión de residuos en los territorios; se hicieron 7 talleres de periodismo ambiental, principalmente con jóvenes, y se apoyaron 9 iniciativas locales, 4 Mesas Ambientales y 9 proyectos ambientales escolares (PRAES).
“Desde la Fundación Coca-Cola estamos convencidos de que debemos fortalecer el desarrollo de quienes están comprometidos con la gestión de los residuos para evitar que estos terminen en el lugar equivocado. Nos entusiasman mucho los resultados del 2021, pero nos llenan de responsabilidad por saber que el camino apenas comienza y que las metas del 2022 son aún más ambiciosas”, afirmó Juan Sebastián Jiménez, Director de Asuntos Públicos, Comunicaciones y Sostenibilidad de Coca-Cola Colombia.
Puntualmente, en Coveñas se apoyó la bioconstrucción de una estación de reciclaje creada con residuos aprovechables y se brindó asesoría en la creación de la ruta de recolección liderada por Chatarrería Coveñas. En Bahía Solano se apoyaron tres iniciativas locales: Océanos Libres de Plástico, El reciclador Saúl Taborda de Ciudad Mutis y la Red de Mujeres con emprendimiento ambiental de Bahía Cúpica. Y, en San Andrés, se acompañaron cuatro iniciativas: Schooner Bight Ethnic Association, COCNAT, Lion Fish y la Recicladora Punta Evans. Quienes participaron en la creación de la Mesa Ambiental y se vincularon al ciclo de formación para mejorar las capacidades técnicas.
En 2022 se implementará la segunda fase del proyecto en Coveñas, Bahía Solano y San Andrés Isla donde se desarrollarán 12 jornadas de limpiezas de playas y manglares para recolectar 13 toneladas de residuos. A diferencia de 2021, “el componente de educación implementará un curso con certificado del Ministerio de Educación, ejercicio de fortalecimiento de capacidades que espera vincular 250 beneficiados”, aseguró Catalina Ospina, Jefe del proyecto. Igualmente, se espera seguir fortaleciendo la articulación con iniciativas locales y superar uno de los grandes retos que es la conformación de la Red Nacional Playas libres, basura cero, para lograr mayor alcance y fortalecer la gestión de residuos del país, por medio de “una alianza nacional para afirmar compromisos sobre el cuidado de ecosistemas marino-costeros, y generar una estrategia nacional para priorizar temas y posibles acciones a desarrollar”, sostuvo Catalina.
Estas actividades generan sostenibilidad en el proceso y aportan a las metas nacionales ambientales, como la protección del 30% de los océanos que se espera lograr este año, y las iniciativas de la Dirección de Asuntos Marinos, Costeros y Recursos Acuáticos, enfocadas en la conservación de biodiversidad marina, costera e insular; el uso sostenible de servicios ecosistémicos marinos, costeros e insulares; el mejoramiento de la calidad de agua marina; la reducción de riesgo por pérdida de biodiversidad y sus servicios ecosistémicos; y el fortalecimiento de la institucionalidad y la organización pública, privada y social para el manejo marino, costero e insular.