Eduardo Atehortua es socio de Asesoría en riesgos con énfasis en Sostenibilidad y Cambio Climático tiene más de 15 años de experiencia durante los cuales ha trabajado con empresas del sector real y financiero. Asimismo cuenta con una amplia trayectoria en temas de RSC, sostenibilidad y ESG. Eduardo está enfocado en contribuir a tres objetivos: promover la inversión responsable y las finanzas sostenibles en la región de América Latina, apoyar a las empresas para que comuniquen de manera efectiva y confiable información social, ambiental y de gobernanza (ESG) a sus grupos de interés, así como educar al mercado para evidenciar la conexión entre sostenibilidad y desempeño financiero de las organizaciones.
¿Cómo concibe la responsabilidad social y la sostenibilidad en su vida?
La responsabilidad social y la sostenibilidad son parte integral de mi vida personal y profesional. Creo que nuestras acciones diarias, desde cómo consumimos hasta cómo trabajamos, deben alinearse con un propósito más amplio de cuidado ambiental y equidad social. Esto implica no solo buscar un equilibrio entre el crecimiento económico y la conservación de recursos, sino también asegurarnos de que las comunidades más vulnerables sean incluidas en las soluciones sostenibles.
¿Qué cambios regulatorios considera necesarios para fortalecer la inversión responsable?
Un marco regulatorio más claro y coherente sobre la divulgación de información ambiental, social y de gobernanza (ESG) es fundamental para que los inversionistas sigan incorporando estos temas en su proceso de inversión. Regulaciones que promuevan la transparencia en la medición del impacto de las inversiones y la alineación bajo estándares mínimos serían pasos importantes para fortalecer la inversión responsable.
¿Cómo está abordando los desafíos relacionados con la sostenibilidad?
Desde mi trabajo, lo primero es escuchar a los clientes y entender sus necesidades particulares. Junto a mi equipo, diseñamos estrategias que generan beneficios económicos ambientales y sociales. Cada proyecto es una oportunidad para fomentar una cultura de sostenibilidad dentro de las empresas con las que trabajamos.
¿Cuáles son las iniciativas más importantes que está promoviendo para aumentar la inclusión financiera en Colombia?
Estamos apoyando proyectos que buscan reducir la brecha de acceso a servicios financieros mediante la tecnología. Esto incluye desde la promoción de plataformas digitales que permiten a comunidades rurales acceder a productos financieros, hasta la colaboración con fintechs para desarrollar soluciones innovadoras que se adapten a las necesidades de sectores no bancarizados. La educación financiera es clave, por lo que también impulsamos programas que capaciten a las personas sobre cómo usar estos servicios de manera efectiva.
¿Cuál es su opinión sobre el crecimiento de las fintechs en Colombia y cómo están colaborando con las entidades bancarias tradicionales?
El crecimiento de las fintechs ha sido un catalizador para la innovación en el sector financiero. Han logrado democratizar el acceso a servicios financieros y ofrecer soluciones ágiles a problemas que antes parecían difíciles de resolver. Las entidades bancarias tradicionales están cada vez más abiertas a colaborar con fintechs, entendiendo que estas asociaciones pueden generar un impacto positivo tanto en la eficiencia de los servicios como en la ampliación de la inclusión financiera. Este ecosistema de colaboración está transformando la forma en que se presta el servicio financiero en el país.
¿Cómo ve el futuro de la inversión responsable en los próximos 5 a 10 años?
El futuro de la inversión responsable es prometedor. Cada vez más inversionistas están comprendiendo que incorporar criterios ESG no es solo una tendencia, sino una necesidad para asegurar la sostenibilidad y cumplir con su deber fiduciario a largo plazo. Espero ver un aumento significativo en la cantidad de fondos dedicados a inversiones sostenibles, impulsados por una mayor conciencia social y regulaciones más estrictas. Además, los avances tecnológicos permitirán que las empresas midan y reporten su gestión de manera más precisa, lo que fortalecerá la confianza de los inversionistas en este tipo de estrategias.
Desde su rol, ¿Cómo contribuye para construir una sociedad mucho más justa y responsable?
Desde mi rol, busco generar cambios estructurales en las empresas con las que trabajo para que estas, a su vez, generen un impacto positivo en la sociedad. A través de la asesoría ayudo a las organizaciones a ser más inclusivas y equitativas, reduciendo sus impactos negativos y contribuyendo al bienestar de las comunidades donde operan. La clave está en escuchar y comprender las realidades locales para diseñar soluciones que sean justas y responsables.
¿Qué invitación le hace a los líderes empresariales y a los inversionistas a la construcción del país?
Les invito a que asuman un papel más activo y comprometido en la construcción de un país más equitativo y sostenible. No se trata solo de cumplir con regulaciones, sino de ver la sostenibilidad como una oportunidad para innovar y generar valor. Es fundamental que las decisiones que tomen hoy no solo beneficien a sus organizaciones, sino que también contribuyan al bienestar de las generaciones futuras. La inversión responsable y la adopción de prácticas sostenibles son herramientas poderosas para lograr un desarrollo más inclusivo y justo en Colombia.